Imagineers de Leyenda: Wathel Rogers, Sr. Audio-Animatronic

Roy E. Disney, sobrino de Walt (no confundir con su hermano Roy O. Disney), afirmó en una ocasión que los parques de Disney son una experiencia mágica, y que Wathel Rogers fue uno de sus principales magos…

Cuando se requería que un objeto inanimado cobrara vida, Wathel Rogers era la principal persona de contacto en WED Enterprises. Entre otras atracciones de los parques Disney que todavía hoy podemos visitar, Wathel fue responsable de insuflar vida a las figuras audio-animatronic del Enchanted Tiki Room en Disneyland, el Hall of Presidents de Walt Disney World y buena parte de los personajes de Piratas del Caribe en ambos parques. John Hench, otro prestigioso artista del departamento de Imagineering, recordaba que siempre que necesitaban que un objeto se moviera, simplemente llamaban a Wathel y con su actitud relajada y tranquila, lo hacía funcionar.

Nacido en Stratton, Colorado, las habilidades de Wathel quedaron patentes desde muy pequeño. Cuando era tan solo un niño, Wathel construía juguetes con todo tipo de objetos que encontraba por la casa y ya de adolescente acostumbraba a crear juguetes mecánicos – mucho más avanzados – con transistores, radios averiadas y demás chatarra que recogía de la calle. Rogers tenía sus objetivos claros, y nada más terminar el colegio se puso en contacto con el estudio de Walt Disney porque era allí donde quería trabajar. Los responsables de Disney que entrevistaron a Rogers quedaron gratamente sorprendidos por su trabajo y sus aptitudes, pero le sugirieron obtener algo más de formación académica antes de incorporarse a la compañía. Rogers se matriculó en el Chouinard Art Institute donde estudio arte y diseño, y al finalizar sus estudios en 1939 volvió a contactar con Disney. Poco tiempo después entró a formar parte del equipo de animación donde participó en películas como Cenicienta, Alicia en el País de las Maravillas, la Dama y el Vagabundo y la Bella Durmiente. Como curiosidad, con su primera paga de 16$ semanales, lo primero que hizo Wathel Rogers fue comprarse un reloj de 15$. ¿Cómo iba a poder entregar su trabajo a tiempo si no tenía un reloj? Desde ese día en adelante, era prácticamente imposible ver a Wathel sin su característico reloj de pulsera de Mickey Mouse.

En su tiempo libre a Wathel le gustaba construir pequeñas esculturas, incluyendo trenes en miniatura que inmediatamente llamaron la atención de Walt que era otro apasionado del mundo del ferrocarril. Conocedor de su habilidad con objetos animados, Walt le entregó a Wathel un pájaro mecánico que se había traído de Europa y le pidió que lo desmontara para ver cómo funcionaba. Ese pájaro tendría un impacto decisivo en la futura atracción de Disneyland “Enchanted Tiki Room”, y por extensión en las demás figuras audio-animatronic que contribuirían al éxito de los parques Disney.

Oficialmente, el primer proyecto de Imagineering en el que participó Wathel fue “Project Little Man”: una figura de apenas 23 centímetros de altura que realizaba movimientos sencillos mediante impulsos eléctricos a través de un entramado de cables que llevaba en su interior. Después de este proyecto, Wathel construyó lmaquetas en miniatura de Jungle Cruise y Main Street USA; de hecho, la maqueta de Main Street USA que muestra Walt en el primer programa televisivo de Disneyland fue obra de Wathel Rogers.

Probablemente el proyecto más famoso de Wathel Rogers durante su larga etapa en Walt Disney Imagineering fue la figura audio-animatronic del XVI presidente de los Estados Unidos Abraham Lincoln para el pabellón del estado de Illinois en la Exposición Universal de 1964-65. El increíble nivel de detalle de la figura, capaz de realizar miles de movimientos incluyendo complejas expresiones faciales, fue la principal sensación de la feria. 

Con el paso del tiempo, Wathel Rogers fue perfeccionando la tecnología detrás de las figuras audio-animatronic de forma que eran cada vez más complejas y realistas. Curiosamente, Rogers dice que él y su equipo simplemente construían lo que decía Walt; era Walt el que decía lo que tenía que hacer la figura, definía sus gestos y sus movimientos, y ellos “solo” se ocupaban de programar esos movimientos y encontrar la mejor forma de hacerlos realidad con la limitada tecnología existente en esa época. Para que la figura resultara realista, no solo la parte mecánica sino también la parte conceptual debían de estar perfectamente logradas.

Después de la muerte de Walt, Rogers continuó trabajando en Imagineering y terminó siendo responsable artístico de Magic Kingdom y responsable de calidad (“Show Quality Standards”) de Walt Disney World. Cada vez que una atracción fallaba o surgía cualquier problema, Wathel era capaz de solucionarlo. Era una persona muy querida en la compañía.

Inmediatamente después de la inauguración del pabellón de Horizons en Epcot en 1983 (para el que Rogers había supervisado la instalación de más de una docena de complejas figuras audio-animatronic), Wathel tuvo que ser ingresado en el hospital para someterse a un complejo bypass coronario. La operación no estuvo exenta de dificultades, obligando a Rogers a permanecer ingresado en el hospital durante 4 meses a lo que siguió un largo periodo de convalecencia en su domicilio. Milagrosamente, en 1984 Wathel abandonó el hospital y regresó al trabajo. En una ocasión dijo que en su trabajo cada día se presentaban retos y nuevas ideas para explorar, y que no había ninguna otra cosa en el mundo que le gustara hacer más.

Wathel Rogers se retiró en 1987, después de 48 años trabajando para la compañía, dedicándose en los últimos años de su vida a otra de sus grandes pasiones: la pintura. En 1995 Wathel Rogers fue nombrado “Leyenda de Imagineering” de Disney, y cuenta con una ventana conmemorativa en Main Street USA (Disneyland) así como una lápida dedicada en el cementerio de Haunted Mansion. Rogers murió en su casa de Arizona el 25 de agosto de 2000 a los 80 años.