Ante todo debes de tener en cuenta que, a pesar de su elevado precio, el desayuno en el castillo de la Cenicienta es una de las experiencias más solicitadas de Walt Disney World y por tanto es imprescindible que hagas tu reserva con exactamente 180 días de antelación.
Por muy extremo que parezca esto, es muy posible que si te retrasas tan sólo unos minutos no queden plazas para el día que quieres desayunar. Así que decide cuándo quieres visitar el castillo, y calcula esos 180 días previos para estar preparado para realizar la reserva.
Una de las ventajas de desayunar en el castillo de la Cenicienta es acceder al Magic Kingdom antes de que abra las puertas oficialmente al resto del público. Esto ya de por sí es una experiencia mágica que merece mucho la pena. Haz tu reserva para las 08.00am en un día que el parque abra sus puertas a las 09.00am, y podrás pasear por Main Street USA hasta el castillo prácticamente sólo.
Luego, cuando hayas acabado tu desayuno, estarás en Fantasyland antes que nadie; una situación privilegiada para acceder a las atracciones más populares antes de que llegue el resto de la gente al parque y se comiencen a formar las colas para Dumbo, Peter Pan, Blanca Nieves y las demás atracciones de Fantasyland.
El diseño y la ambientación medieval del restaurante, así como la anticipación que los Imagineers de Disney han sabido crear, es excelente. Los visitantes deberán presentarse en un podio situado a la entrada del restaurante, justo en frente de unas espectaculares puertas de acceso al restaurante, antes de ser guiados hacia el comedor. En este entorno idílico podrás sacarte una fotografía con la mismísima Cenicienta, para posteriormente seguir la alfombra roja hasta el restaurante por una impresionante escalera de caracol.
Posiblemente lo que más te llame la atención al entrar en el comedor son las espectaculares vistas a Fantasyland. Una vez sentados, en cuanto empieza el desayuno empieza el espectáculo. A medida que van apareciendo las distintas princesas, escuchamos su historia por los altavoces. Ariel, Belle, Aurora y Blancanieves son algunas de las princesas que podremos ver mientras desayunamos.
Las princesas visitan cada mesa, y durante tu desayuno, recibirás en tu mesa la fotografía que te hicieron en la entrada. El paquete incluye varias fotografías en distintos tamaños en una bonita carpeta.
Fruta fresca, zumos naturales, bollería, huevos con bacon, salchichas… Come todo lo que quieras, y posiblemente no tengas que comer el resto del día!
El precio oscila entre los 30 y los 50$, dependiendo de si el menú es para adultos o niños, aunque realmente estás pagando por la experiencia de ver el castillo por dentro.
